Bocchi y Pocchi, un par de calcetines muy especiales, son amigos inseparables. Pero, una noche, ¡Pocchi desparece! ¡Oh, no! ¡Bocchi lo echa tanto de menos! ¿Dónde puede estar?
Cada día la vida nos va lanzando aleatoriamente notas musicales de forma desordenada. Unas son alegres, otras tristes, algunas ruidosas y otras extrañas... La partitura la vas formando con aquellas que te son dadas y con aquellas otras que al cerrar los ojos puedes soñar.
A mi hermano le encantó el regalo de nuestra tía.
“La llamaré Teresa” dijo al ver la muñeca de trapo.
Cuando mi hermano dijo que quería dormir con Teresa,
mi padre dijo: “No es grave. Ya se le pasará”.
Puerta cerrada, luz apagada. Nicolás mantiene los ojos abiertos en la cama y la mirada fija en las agujas de su despertador. Le gustaría que las horas pasaran más rápido. El oído atento hacia el sonido de la casa. Quiere que sus padres vayan a la cama inmediatamente.
Lucía y sus amigos siempre andan buscando alguna cosa: un lugar para hacer un bocado todos juntos, un tesoro que está bien escondido, una mamá para unos pollitos que tienen frío...
Luz y Oscuridad tuvieron cinco hijos: Amanecer, Mañana, Mediodía, Atardecer y Medianoche. Cuando los cinco hijos dormían profundamente, Tiempo vino y les susurró algo al oído.
¿Qué crees que pasó cuando abrieron los ojos?
Hoy, Clara sube al autobús. Ella no piensa que el viaje será tan divertido. En cada parada suben nuevos pasajeros y ocurren "cosas". Hay que prestar atención a las imágenes que se van sucediendo a lo largo del recorrido.